En el 21 de abril de 2009 se hizo historia cuando se decidió que Caracas (Venezuela) seria la primera capital de país en el mundo que se declararía antitaurina.
Para ser más precisos, fue el Consejo Municipal de ‘Libertador’ el que tomó la decisión. La grande área metropolitana de Caracas está formada por cinco municipalidades, y Libertador es la del centro de la ciudad y la única en el estado ‘distrito capital’ de Caracas; por lo tanto esta declaración será en efecto una declaración de la capital de Venezuela.
Después de oír los argumentos del ciudadano Nicolás Álvarez introducido por la Concejal Celina Vega, los Miembros de Consejo de ibertador aprobaron la petición de declarar la ciudad antitaurina. Esto es muy importante no sólo debido al significado histórico, pero también porque en esta municipalidad está el Nuevo Circo, la única plaza de toros en Caracas, que no ha sido usada durante décadas, pero ahora que ha sido reconstruida para el uso de acontecimientos culturales, hay riesgo que la industria taurina también pueda reclamarla para corridas de toros. La declaración prevendrá esto ya que explícitamente declarará que el Nuevo Circo no debería ser usado para corridas de toros.
Entrada del Nuevo Circo, la plaza de toros ‘sin corridas’ de Caracas
La propuesta aprobada de la declaración es cuádruple: a) rechazo público a la tauromaquia en la municipalidad; b) apoyo financiero y logístico al Núcleo de Desarrollo Endógeno Nuevo Circo Artístico (el grupo que organiza acontecimientos culturales sin crueldad para la plaza de toros); c) declarar al Nuevo Circo como un espacio libre de tortura; y d) declarar Libertador una municipalidad antitaurina.
La campaña que consiguió esto fue liderada por el grupo de protección de animal más grande en el país, APROA, apoyado por otros grupos de protección de animal como AnimaNaturalis, que ahora están ayudando a los funcionarios del ayuntamiento a finalizar tal declaración, que pronto se va ha hacer oficial.
Cartel de campaña electoral para el Alcalde de Libertador, Jorge Rodríguez
Habrá ahora dos municipios antitaurinos en Venezuela, tres en Colombia, uno en Ecuador, y juntos en el mundo el número ya ha alcanzado 75, y sigue aumentando. Esto es sólo otro ejemplo de como la oposición pública a la tauromaquia está alcanzando las mentes de los políticos, que comienzan a traducir tal oposición en verdaderas decisiones políticas.