Ecuador. El domingo 28 de marzo Integrantes de la Fundación HUELLAS de Loja y miembros de AnimaNaturalis se movilizaron hasta la ciudad de Gonzanamá, a tres horas de la capital provincial, con el propósito de manifestarse pacíficamente contra las corridas de toros y a la vez junto con la Dra. Mercedes Araujo, Delegada provincial del Defensor del Pueblo, velar por que no ingresen menores de 12 años a dicho espectáculo.
En días anteriores tanto Huellas como Defensoría del Pueblo de Loja enviaron comunicados al Ing. Norman Espinoza, Alcalde del Cantón Gonzanamá exponiendo la Resolución Defensorial que prohíbe el ingreso de niñas y niños a las plazas a nivel nacional, y su obligación como autoridad competente de cumplir y hacer cumplir lo dispuesto.
Sin embargo el Alcalde, junto con el Comisario Municipal, miembros de la Policía Nacional y demás funcionaros públicos, permitieron que los niños ingresen sin ningún tipo de reparo.
Los activistas por los derechos de los animales llegaron cerca de las 09H30, en cuanto se aproximaron al recinto ferial y al ser identificados por las camisetas y carteles contrarios a las corridas, fueron impedidos de ingresar a la feria alegando que el evento era privado y que el Alcalde había dado la orden expresa de que no se les permita la entrada.
Al disponerse a manifestar el rechazo a la tortura de los animales en la vía pública ya que se contaba con el permiso de la Intendencia General de Policía para la manifestación y al desplegar los carteles con frases como "Basta de Tortura" o "La Tortura no es Cultura" varios de los integrantes fueron agredidos verbalmente por empleados municipales y por el policía Tnte. Jasmani Vivanco, curiosamente delegado por la Intendencia, quien les exigía que se retiren a 30 metros de la entrada. Por mantenerse firmes los jóvenes también fueron vejados de palabra por el Comisario municipal, llegando a recibir amenazas y hasta agresiones físicas (empujones) de miembros de la Policía Nacional, quienes claramente parcializados estuvieron ahí únicamente para cuidar los intereses de los de los organizadores de la feria. Durante la manifestación algunos activistas lograron infiltrarse al recinto ferial y pudieron testificar y evidenciar el ingreso y estancia de menores en el coso taurino, incluso en primera fila.
Aproximadamente al mediodía llegó la Dra. Mercedes Araujo, Defensora del Pueblo de Loja, que también exigió el retiro de los niños, siendo también agredida verbalmente por un empleado municipal, su autoridad tampoco fue respetada salvo por la presencia de las cámaras de medios televisivos. La Dra. abogó por los manifestantes exigiendo se les permita entrar hasta la plaza lo cual no fue aceptado. Finalmente el policía Cptn. Jaramillo perimitió el ingreso de la Defensora quien acudió a hablar con las autoridades municipales.
El Alcalde no se presentó y el Vicealcalde no se encontraba en condiciones de atender a la Defensora, por lo que únicamente logró dialogar con el Gobernador de Loja, quien ordenó se anuncie por los altavoces el pedido de que se retiren los niños menores de 12 años de la plaza. Se pudo comprobar la salida de algunos niños, sin embargo como las gráficas lo muestran se quedaron la mayoría, esto porque el Comisario municipal anunció que la ley establece que si los niños están con sus padres pueden quedarse, lo cual es falso.
Posteriormente gracias a la vigilia de la Defensora no se permitió el ingreso de mas niños, los dos únicos turistas extranjeros que se dieron cita a las corridas se regresaron, así mismo se presenció el retiro de la Asambleísta Nívea Vélez y Picoita, incluso el Ing. Pablo Gahona, director del MAGAP en la provincia de Loja también se ausentó en cuanto empezó la corrida. Todos ellos y gran parte del público que se encontraba fuera del recinto ferial felicitaron a los manifestantes y dieron muestras de apoyo a la causa antitaurina.
Consideramos exitosas las acciones realizadas antes y durante la manifestación ya que se logró la presencia de la Defensora del Pueblo de Loja que hizo prevalecer la ley a pesar de la resistencia de las autoridades locales y organizadores, el que innumerables personas se regresaran de la plaza o que decidieran en el último momento a no entrar, además de lograr que funcionarios públicos como la Sra. Asambleísta y el director del MAGAP dejando de lado todo compromiso político, manifiesten su respeto a las leyes y el rechazo a la tortura y muerte de los toros con su salida de la plaza. Así mismo, si la intención es atraer al turismo, la nula participación de extranjeros en la feria y el retiro de los dos únicos presentes en la misma es clara muestra de que ésta clase de espectáculos públicos basados en el acoso, maltrato, tortura sistemática y muerte de un animal es una actividad que tiene poca o nula acogida entre los visitantes de otros países.
Lamentamos la actitud proterva de las autoridades locales de Gonzanamá, empleados públicos y ciertos miembros de la Policía Nacional que, en lugar respetar y hacer cumplir las leyes y disposiciones nacionales, hicieron prevalecer sus intereses a cualquier precio, incluso por sobre los derechos de los menores que están amparados por el Código de la Niñez y Adolescencia ratificados por la Defensoría del Pueblo y demás organismos de control, a más de las agresiones a quienes haciendo uso de su pleno derecho a manifestarse, en este caso contra la práctica violenta y cruel de la tauromaquia.
La Fundación Huellas, AnimaNaturalis Internacional sede Ecuador y el INREDH están tomando las acciones legales pertinentes para que los contraventores sean sancionados
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