LOURDES LÓPEZ | Para La Vanguardia
Barcelona. (La Vanguardia).- El Parlamento de Catalunya en una ajustada votación ha aprobado hoy por 68 votos favorables, 55 en contra y 9 abstenciones la prohibición de las corridas de toros en esta comunidad a partir de 2012 siguiendo una Iniciativa Legislativa Popular. El voto de 32 diputados de los 48 que tiene de CiU y el de 3 de los 37 del PSC, ha sido el que ha decantado finalmente la balanza a favor de las tesis animalistas, respaldadas por ERC e ICV y rechazadas por PP y C's.
Catalunya se convierte así en la segunda comunidad española en vetar estos festejos, tras hacerlo Canarias, en 1991.
Entre los diputados que han votado a favor de la prohibición destacan el presidente de CiU, Artur Mas;  el de ERC, Joan Puigcercós; el vicepresidente de la Generalitat, Josep  Lluís Carod-Rovira; el conseller de Interior, Joan Saura; y dirigentes  de la federación nacionalista como Oriol Pujol, Felip Puig y Joana  Ortega (UDC).
Los tres diputados del grupo socialista  abolicionistas son Antoni Comín y el periodista Josep Maria Balcells, ex  jefe de prensa de Pascual Maragall, y la Núria Carreras. El primer  secretario del PSC, José Montilla, ha votado en contra de la prohibición, al igual que 31 diputados de su partido, porque, ha argumentado, "cree en la libertad".
La  diferencia entre taurinos y antitaurinos ha sido de 13 votos, cinco más  que los 8 de diferencia que hubo en diciembre cuando se votó y aprobó  la admisión a trámite de la ILP.
El debate ha trascendido estos  días el mundo de los ruedos y se ha trasladado a la arena política al  vincular la prohibición con el clima de desencuentro entre Catalunya y  España tras la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut.  Desde CiU, ERC y ICV, especialmente tras conocerse la votación, se ha  tratado de desvincular estos temas y de apaciguar los ánimos.
En las filas del PP y en las del PSOE es dónde más ha inquieta la decisión tomada hoy. Los populares ya han avisado de que presentarán en el Senado una moción en la que se solicite al Ministerio de Cultura "el  reconocimiento del carácter cultural de la Fiesta de los Toros y el  dictado posterior de normas para su protección" con el objetivo de dejar  sin validez la aprobación. Los socialistas ya habían transmitido en los  últimos días su preocupación en torno al tema y hoy han expresado, su  respeto por la decisión del la cámara autonómica catalana, pero han  insistido en que el Ejecutivo no es partidario de una prohibición de  estas características.
La histórica decisión tomada por los  diputados catalanes recalienta, más si cabe, el debate en la calle. Esta  mañana simpatizantes y abolicionistas se congregaron frente al  Parlament donde Carod fue recibido al grito de "dictador, dictador" y la entrada de Montilla fue presidida por silbidos.  A la salida de los disputados, el presidente de CiU, Artur Mas, y el  presidente del Parlament de Catalunya, Ernest Benach, han sido los  principales destinatarios de los insultos proferidos por un grupo de  protaurinos. Numerosos medios españoles e internacionales se han  arremolinado en las puertas de la cámara catalana ante la expectación  sin precedentes que ha generado la votación y han trasladado a sus webs la sorpresa por su resultado.
El debate previo
El  debate previo a la votación, que se ha iniciado a las 10:00 horas, ha  servido para demostrar la falta de acercamiento que se ha producido en  el proceso de tramitación de la iniciativa y el empecinamiento de  algunos grupos en ver una vinculación inequívoca entre la prohibición en  Catalunya y el desarraigo respecto a todo lo español.
La portavoz de la plataforma "Prou!",  promotora de la Iniciativa Legislativa Popular, Anna Mulà, ha abierto  el turno de palabra para reclamar a los diputados que lanzasen un  "mensaje de compasión y progreso a la humanidad" y votasen  mayoritariamente a favor del veto.
El  diputado del PP, rafael  Luna, ha defendido en su intervención la inutilidad de una prohibición  que costará el dinero que se podría emplear en "hacer 6 hospitales y 100  escuelas públicas". Ha criticado que "todo lo que no sea exclusivo  catalán molesta a los nacionalistas" y que ve como una contradicción que  los grupos que defienden la cultura catalana ataquen esta fiesta. "¿Es  porque se comparte con España?", se ha preguntado. Ha lanzado una  crítica al los diputados socialistas por votar a favor del aborto en  bloque y dar en este tema libertad de voto "por conciencia".
Como  el grupo popular, desde Ciutadans su presidente Albert Rivera ha  acusado a los nacionalistas de votar en contra de los toros por  "antiespañolismo".
El diputado del PSC y portavoz en asuntos  taurinos, David Pérez, ha manifestado que aunque había dado libertad de  voto esperaba que sus diputados votasen no. "La minoría que prohibiría  los toros lo hace exclusivamente por motivos animalistas", ha aseverado  Pérez. El no está muy extendido en el grupo de los socialistas  catalanes. El propio president de la Generalitat ya expresó su postura  contraria a la ILP, en tanto que prohibición.
Desde CiU, Josep  Rull, ha dado argumentos para votar a favor de la prohibición, en  contra, e incluso para abtenerse, aunque ha criticado que se comparen  las corridas de toros y los correbous: "La muerte del animal no  es ninguna anécdota", ha aclarado. El líder convergente también ha  querido separar el debate taurino del de la identidad catalana "las  corridas son tan catalanas como cualquier otra tradición". para acabar  recordando que Antonio Machado, Lope de Vega, Santiago Ramón y Cajal o  Jacinto Benavente, entre otros, mostraron su "animadversión" hacia las  corridas de toros simplemente para lograr "un país mejor".
Desde  ERC, Joan Puigcercós ha criticado a quienes aseguran que los toros no  sufren en la plaza porque generan endorfinas y ha defendido que "no  puede dejarse que los toros languidezcan porque va poca gente: no por  haber crímenes minoritarios no se legislan"". El líder republicando ha  defendido que estos argumentos son falsos o directamente carecen de  sentido. Ha dicho que el debate no está en si la tradición es catalana o  no, que "el abolicionismo no tiene patria". Ha acusado a quienes han  querido en catalunya "una confrontación que no es tal" porque el debate  está en todo el Estado y en otros países.
Francesc Pané, diputat  d'ICV, en la que ha sido la intervención más poética ha apelado a la  sensibilidad, la clemencia y la compasión con el toro que sufre y perece  sin elegirlo. "En la ILP hay más que una iniciativa, hay un clamor  ciudadano que no se ha de desperdiciar como la fuerza del toro sobre la  arena", ha continuado. Ha desvinculado el debate territorial del de esta  tradición que exalta la "crueldad".
Tras el debate, la votación de hoy ha cerrado un proceso de seis meses que se inició el 11 de noviembre de 2008 cuando la Mesa de la Cámara catalana admitió a trámite una iniciativa que pedía la prohibición de las corridas de toros en Catalunya. Sobre las espaldas de los 135 diputados del Parlament,  que al final han votado directamente el texto del dictamen al retirarse  hoy las 3 las enmiendas presentadas, ha recaído esta polémica decisión  de enviar la fiesta de los toros al baúl de los recuerdos.
La plataforma ciudadana 'Prou!' (¡Basta!)   -que recogió 180.000 firmas cuando las necesarias eran 50.000- ha  valorado que el proceso culminado hoy en el pleno del Parlament le da  esperanza para que la abolición se extienda a otras CC.AA.
Después de seis meses de acalorados debates entre abolicionistas y defensores de la tauromaquia,  de enconadas discusiones sobre si las corridas son un arte o simple  tortura, de menciones a la catalanidad de los toros, el proceso  parlamentario ha llegado hoy a su fin envuelto en una gran expectación  mediática y una polémica política que seguirá creciendo.







